Cómo dejar de procrastinar

¿Eres de los que piensan “no dejes para hoy lo que puedes hacer mañana” en lugar de “no dejes para mañana lo que puedes hacer hoy”?, ¿te fastidia o te da pereza cuando te dicen que debes hacer algo en un momento dado cuando sabes que podrías hacerlo después? Si es así, entonces estás procrastinando.

Para explicarlo un poco mejor, procrastinar es lo mismo que postergar. Cuando posponemos una actividad, tarea, asignación o situación que deberíamos realizar o atender, y en lugar de atenderla preferimos hacer otras actividades que nos gustan y nos divierten o que no tienen nada que ver, estamos procrastinando.

Generalmente, las actividades que postergamos son necesarias o es obligatorio que las realicemos pero no nos gustan o nos generan estrés. Nos resultan fastidiosas, molestas, difíciles o complicadas, razón por la cual las aplazamos. Lamentablemente, no podemos aplazarlas de por vida. Tarde o temprano tenemos que poner manos a la obra y trabajar para atenderlas. Por ello, te daré un par de tips para obligar a tu cerebro a dejar de procrastinar.

Disciplina

Una de las formas para dejar de procrastinar es tener disciplina. Piensa en una tarea que debas cumplir y con firmeza decide dedicarle tiempo. Si es necesario, convéncete de que solo trabajarás por unos 5 minutos y luego te detendrás.

Cuando empieces a trabajar y veas que estás logrando tu cometido probablemente decidas que, ya que empezaste, mejor terminarlo y ¡listo!, sin estar pendiente de la hora. Si la tarea es grande o complicada, divídela en trozos más pequeños y complétalos uno por uno. Trabaja cuando tengas mayor cantidad de energía porque esto te facilitará realizar las tareas y estarás menos tentado a procrastinar. Asimismo, aleja de ti las posibles distracciones y si es necesario, piensa en una recompensa que te regalarás a ti mismo cuando termines por lograr un buen trabajo.

Diversión

De ser posible, busca la manera de convertir una actividad tediosa o una tarea titánica en algo que disfrutes hacer. Suena difícil, pero si lo logras no procrastinarás ni tendrás problemas con ella a futuro si es una actividad que debes repetir.

Intenta convertirla en un juego o en una carrera. Para cumplir con alguna tarea fastidiosa puedes incluso utilizar tu imaginación y simular que estás haciendo otra cosa distinta. Busca el lado positivo y terminarás más rápido. Así podrás hacer las cosas que te gustan sin preocuparte de no haber terminado las que tenías que hacer.

Si quieres que la organización empiece a formar parte de tu vida, entonces será mejor que aprendas a ser una persona organizada. En el siguiente enlace conocerás las mejores formas para conseguirlo en menor tiempo del que crees posible: https://comolopuedohacer.com/una-persona-organizada