Cómo reparar el cable USB de tu iPhone o iPod
Aunque cuentes con una de las mejores marcas y sistemas operativos de dispositivos móviles, no estas exento de sufrir disgustos gracias al resto de accesorios que permiten la funcionabilidad de tu dispositivo.
Entre estos accesorios, el más importante sin lugar a duda, es el cable USB, de tu iPhone o iPod. Los cables de los dispositivos ensamblados por Apple no son aplaudidos por su durabilidad, todo lo contrario. Aunque se trata aparentemente de un cable tan resistente como los utilizados por otras marcas, no es así. De hecho, existe un alto porcentaje de usuarios de la elegante compañía que no superan el año de haber hecho su compra cuando ya el cable USB presenta sus primeras fallas.
Las primeras señales de que nuestro cable está fallando
La conexión y desconexión continua de nuestro dispositivo conectado a la corriente es la primera pista de que algo puede andar mal con nuestro cable USB. Si esto pasa al estar conectado a la corriente eléctrica y también con la conexión mediante un ordenador, es porque el cableado interno del USB comienza a desgastarse en algún área. Lo cual, descubrimos después de practicar algunos movimientos sobre el cable. Además de notar que se restablece la conexión regular tras hacer contacto en una zona particular.
Pasos a seguir
Y precisamente identificar esa zona que provoca la desconexión de nuestro dispositivo a través del cable. Será el primer paso para lograr la reparación total del mismo. Pues una vez identificada el área, procederás a cortar el cable. Lo dividirás.
Posterior a eso, cortarás el forro o cubierta principal. En el caso de los dispositivos iOS, es de color blanco. Esto lo harás justo en la punta de ambas divisiones de tu cable USB. Para lograr un corte superficial del cable y no ir más allá de la cubierta blanca del mismo, es preferible usar un cúter o exacto. Es un instrumento que te permitirá mayor precisión al realizar el corte a lo ancho del cable. Quitando la cubierta blanca de al menos unos 2cm del cable.
Una vez dejes al descubierto los cuatro cables internos de color blanco, verde, rojo y negro respectivamente. Aplicarás el mismo procedimiento con cada uno de ellos. Ahora con mayor atención de no ir más allá de la cubierta de color o sino, podrías cortar lo verdaderamente importante de estos cables. Que son los conductores por los cuales se transmiten la corriente eléctrica.
Ya aplicado el procedimiento en ambas puntas de la división del cable, ahora será cuestión de unir los conductores de una mitad con los de la otra. Lo cual puedes hacer con ayuda de una cinta adhesiva o tirro para ducto. Permitirá el aislamiento de cada uno de los conductores, que no deben mantener contacto entre si para su correcto funcionamiento.
Una vez unidos todos los conductores, puedes probar su funcionamiento. Si todo parece andar bien, terminas por cubrir la zona de corte con la misma cinta adhesiva y nuevamente tendrás tu cable USB con total funcionabilidad.
