Cómo puedo preparar una hamburguesa

Este es uno de los platos más sencillos y ricos que se pueden compartir en familia. Si bien es bastante popular en Estados Unidos, también lo es para nosotros que nos gusta disfrutar de sabores sencillos y deliciosos. La hamburguesa es una comida bastante completa porque posee carbohidratos, proteína, vitaminas y fibra que surgen de estos ingredientes. Es un plato que no importa cuántas veces podamos hacer, no nos queda espacio en nuestro estómago para poder tener un elemento adicional. Las hamburguesas clásicas son las de carne, la cual protegen en su interior una rica mezcla de aderezos y un sinfín de sabores increíble.

Los ingredientes que se deben tener para poder prepararla

Si combinamos la hamburguesa con una bebida saludable podrás disfrutar de una rica comida. Entonces ¿Qué debemos tener en cuenta para poder hacer una rica y deliciosa hamburguesa? Pues detallar y definir nuestro ingrediente principal: la carne. Esta deliciosa parte de nuestra felicidad puede ser de res, de cerdo o de pollo. Con solo tener un buen ojo con el corte de la carne puedes tener tu hamburguesa clásica, bien preparada y al gusto. Luego de tener nuestro trozo, debemos molerla con nuestro carnicero de confianza o en una máquina (eléctrica o no) de carne. Si compras la carne molida, será sencillo aunque no evaluarás muy bien de donde proviene.

Estos son los pasos

Una vez tengas carne molida, debes observar bien tu otro ingrediente: el pan. Este debe ser suave y con un ligero sabor dulce. El truco está en que esté tostado por las caras internas. Ten en cuenta también los demás ingredientes, como el queso americano (ideal porque se funde con la carne), tomate, lechuga, cebolla (que te dan textura, color y sabor a las hamburguesas). Estos productos deben estar frescos y bien lavados. Ten en cuenta los aderezos que son claves y todos los conocemos: salsa de tomate, mostaza y mayonesa.

Colocamos la carne molida en un bol y le agregamos un huevo y sal. Mezcla todo y añade ajo, el perejil y pimienta. Haz bolas de carne y aplástalas hasta que obtengas el tamaño de la hamburguesa que quieras. Prepara el sartén o plancha que esté bien caliente y échalas a cocinar. Lo demás también es conocido por todos. El pan lo tibias en la parrilla, luego lo colocas en una superficie plana y rellenas a tu gusto. Le aplicas el queso, las salsas y todos los complementos que quieras. Lo mejor que tiene este plato es la versatilidad que posee.