Cómo hacer pintura acrílica casera
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Cómo hacer pintura acrílica casera
Para adentrarnos un poco en el tema es bueno saber que la pintura acrílica casera tiene muchos atributos. Por ejemplo su secado es menos retardado que el óleo, que es en base a aceite. Su efecto al secarse no es tan distante al recién aplicado; tiene una gama variada de colores en el mercado que suelen ser vivos. Y mucho de eso se lo debe a la química de su composición puesto que soporta todas estas propiedades que son muy buscadas por los artistas.
Materiales para la pintura acrílica casera
Pero ¿Cómo hacer una pintura acrílica casera? que probablemente servirá a estos para una cantidad innumerable de prácticas. Pues para ello necesitaremos una lista de cosas. Empieza por un recipiente con tapa, pega, pintura de paredes (opcional), colorantes de comida y removedor, que puede ser un palito de madera.
Pasos para la elaboración de la pintura
Teniendo estos instrumentos se puede empezar a elaborar las pinturas acrílicas caseras. Que además contaran con un brillo increíble que es propio de la pega y este mismo producto. Además puede conseguir ciertas variantes.
El proceso comienza con el vertido de la pega en el envase y a continuación dependiendo del color que se quiera lograr se suministra una o más gotas de colorante. Estas han de removerse y en un santiamén queda lista la pintura. Por si su principal conservación debe ser mantener el envase cerrado.
También hay otras técnicas para retardar el proceso de secado de la pega como puede ser el de aplicar a la mezcla pintura para paredes. Es decir por cada dos porciones de pintura tres de pega junto a la cantidad de color que se requiera.
Una variante muy particular de este engrudo vistoso y brillante pasa del mundo de las artes plásticas al del maquillaje. Puesto que con ella se puede hacer una pintura, siempre y cuando la pega no sea toxica. Ese es el requisito principal, y así se puede hacer un Labial despegable o magic doble tatto.
Una mezcla con muchas aplicaciones
Esta versatilidad en la mezcla permite que una sola iniciativa creadora consiga varias aplicaciones. Motivándonos así a seguir experimentando y podemos pasar de crear las pinturas de acrílico casera a muchas cosas más. Como brochas, papeles, acuarelas y temperas caseras, entre muchas cosas más.
Las ventajas que se pueden conseguir con esta pintura son de ahorro económico y de una variación en la forma de experimentar el acrílico. Puesto que se empieza a partir de la creación del mismo color.