Cómo hacer la salsa de pasta perfecta
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Cómo hacer la salsa de pasta perfecta
La comida siempre es un punto de encuentro entre amigos, pareja o familiares. Destacarse con platos sencillos es más fácil de lo que muchos se imaginan. Por eso, si están planeando una cena o quieres rápidamente asombrar a los invitados de una reunión sorpresa, la pasta nunca deja mal a nadie. Solo debes tomar en cuenta ciertos consejos que ayudarán a tu plato ser la estrella de la velada. Especialmente debes enfocarte en la salsa. No necesita llevar muchos ingredientes para crear la salsa de pasta perfecta. Solo debes aportar mucho sabor y quedará estupenda.
Todo está en la salsa
El verdadero secreto de un plato de pasta memorable está en la salsa. Hacerla es sencillo, lo mejor es que siempre puedes tener más recipientes guardados en la nevera para disfrutarla cuando quieras.
Una salsa de tomate es la base para muchas recetas. Podrás transformarla en bolognesa al agregarle carne. También en vegetariana al colocarle champiñones y/o berenjena, las opciones son infinitas.
Mientras que tengas la salsa de pasta perfecta como base, todas tus preparaciones serán geniales. Incluso puedes usar esta base para guisados y otros platillos.
Ingredientes para la salsa de pasta perfecta
- Tomates maduros
- Cebolla
- Aceite de oliva
- Dientes de ajo
- Azúcar
- Pimienta
- Orégano fresco
- Albahaca fresca
- Sal
- Puré concentrado de tomate
Preparación de la salsa de pasta perfecta
Es muy importante tomar en cuenta el primer ingrediente. Mientras más maduros estén los tomates, mejor quedará la salsa.
Lo primero que debes hacer es pelarlos. Para ello debes lavarlos con agua fría, realiza con un cuchillo una especie de “X” en la parte inferior del tomate. Luego en una olla con agua los dejas hasta que hiervan. En la marca verás como la piel se va levantando.
Cuando sientas que están suaves al pincharlos con un tenedor, retíralos del fuego y coloca agua fría. Así podrás pelarlos con mayor facilidad. Hay personas que deciden retirar las semillas y la pulpa, pero si no te molestan, no hay ningún problema.
En las tiendas de cocina puedes encontrar elementos que te ayudaran a eliminar las semillas del tomate sin desperdiciar la pulpa. Pero puedes retirarlas fácilmente con ayuda de una cuchara si no dispones de ellos.
Luego de todo este proceso puedes hacer la salsa aplastando los tomates o llevándolos a la licuadora con los demás ingredientes.
El toque especial será el sabor de la albahaca fresca en tu salsa. Prepárala y sorprende a tus invitados.