Cómo hacer helado de oreo casero
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Cómo hacer helado de oreo casero
El helado de oreo casero es un postre delicioso, que no tiene nada que envidiarle a los que venden en cadenas de comida rápida. Si deseas disfrutar de una merienda dulce junto a los niños o en una reunión con amigos en una tarde calurosa o un domingo, solo debes seguir unos sencillos pasos y utilizar unos pocos ingredientes para realizar un rico helado de oreo casero.
Receta fácil para hacer helado de oreo casero
Ingredientes que necesitarás:
- 4 paquetes o tubos de galletas de oreo
- 2 tazas de crema de leche o nata para montar
- 1 lata de leche condensada
- Esencia de vainilla
Pasos para hacer el helado de oreo casero:
- Separa el relleno de la galleta de 3 tubos de oreo. Resérvalo.
- Luego, Aparte, tritura en un procesador o coloca dentro de una bolsa plástica las galletas sin relleno para triturarlas con un rodillo hasta que quedé un polvo fino.
- Después Mezcla el polvo de galletas con la leche condensada. En otro bowl, monta con una batidora la crema de leche o nata hasta que se vuelva espuma y añade la vainilla.
- Incorpora con cuidado la mezcla de galletas junto con la de crema de leche. Si está demasiado espesa puedes añadir un chorrito de leche líquida.
- Coloca en una bandeja o bowl, espolvorear por encima las galletas troceadas del tubo restante junto con el relleno reservado. Llevar al congelador por 30 minutos. Mezclar un poco y volver a congelar por un par de horas más hasta que el helado este firme.
- Sirve el helado en copas con nutella, chantilly o sirope de chocolate por encima y disfruta de este delicioso helado, incluso mejor que el de las heladerías.
Toppings adicionales para el helado de oreo casero
Aunque el helado de oreo casero es suficientemente dulce y calórico, si deseas, puedes incorporar algunos toppings e ingredientes adicionales para hacer de esta receta algo aún más especial. Estas son algunas de las opciones que puedes incorporar a tu helado de oreo casero:
- Fresas y bananas picadas en trocitos.
- Avellanas, nueces o cualquier fruto seco de tu preferencia.
- Pasitas.
- Arándanos, cerezas o blueberrys.
- Coco rallado.
- Chispas de chocolate.
- Galletas de otros sabores troceadas.
- Lluvia de chocolate o de colores.
- Dulce de leche.
- Granola o arroz inflado.
- Caramelos de café triturados.
- Por supuesto, un poco de sirope o jarabe de chocolate por encima.