Cómo elaborar un serúm para mejorar la apariencia del rostro
Los serúms faciales son productos que se usan para nutrir e hidratar la piel más profundamente que las cremas faciales, ya que cuentan con una concentración de activos mucho más alta, que pueden reparar las capas más internas de la piel. Pueden ser usados también para reducir las arrugas, aportar luminosidad al rostro y tener una piel más suave y saludable. Hay muchas formas de hacer estos serúms en casa, con productos naturales y mucho más económicos.
Sérum facial de vitamina C casero
Un serúm con vitamina C puede ser muy efectivo para lograr que la piel del rostro se vea lisa, rejuvenecida, unificada y luminosa, además, mejora la apariencia de las manchas y deja la piel muy suave. Para preparar el serúm necesitas:
- 1,5 g de ácido ascórbico
- 10 ml de agua o agua destilada
- 1 ml de glicerina líquida
En un envase se coloca el agua y se agrega la vitamina C en polvo, luego se añade la glicerina líquida y se remueve hasta lograr una mezcla homogénea. Luego se vierte en un bote vidrio oscuro para que se conserven las propiedades. Preferiblemente guardar en la nevera para mantener en perfecto estado.
Sérum facial casero con ácido hialurónico
El ácido hialurónico es uno de los productos más recomendados para la piel, puede hacer que se vea hidratada y mejorar la apariencia de las líneas de expresión y arrugas. Necesitarás:
- 1 g de ácido hialurónico en polvo
- 100 g de agua
- 16 gotas de conservante.
En un recipiente se coloca el agua y se pone por 10 minutos en el congelador. Se retira y se agrega el polvo de ácido hialurónico, se mezcla y se pone en la nevera por 6 u 8 horas. Se remueve muy bien y se vuelve a refrigerar hasta que tenga 24 horas cuando se agrega el conservante. Colocar en un frasco de vidrio opaco y mantener en la nevera.