Cómo cultivar cebollín en casa

Horas y horas solemos pasar en el supermercado en busca de nuestros vegetales y hierbas favoritas. Sin duda, los más buscados son aquellos que no sólo sirven para comerlos solos o acompañados dentro de una ensalada. Sino también aquellos que nos sirven para condimentar y agregar un toque más especial a nuestra carne, pollo, arroz e incluso pastas. Como lo es el cebollín. Lo que muchos no saben es que se puede cultivar cebollín en casa.

El cebollín puede usarse de muchas maneras

Usado mayormente como aliño en diversos tipos de comida, el cebollín es una hierba que se puede usar de diversas formas. Desde su estado más natural, hasta llegar a sofreírlo o rayarlo para que forme parte de alguna receta especial. Su sabor picante característico es especialmente añadido en las mejores sopas. Aportando además del sabor, su riqueza en vitamina A, B y C, teniendo un gran nivel de proteínas. Además, rico en agentes antibacterianos que fortalecen nuestro sistema digestivo.

Así que, es hora de que comiences a aprovechar al máximo tu próxima compra de cebollín.  En lugar de deshacerte de la raíz del mismo, puesto que no se utiliza como alimento, esta vez, procura cortar por encima de esta. Al menos dos centímetros por encima, y no la botes. Usa tu cebollín de la forma que prefieras y deja a un lado la raíz y parte del tallo. Para más adelante darle el mejor uso posible.

Primer paso

Primero deberás preparar una maceta, en un envase de tu agrado. Con arena o tierra idónea para el cultivo de cualquier planta. Humedece la arena y ubícala al aire libre, pero sin que esta llegue a recibir alguna vez luz solar de manera directa. Pues esto podría perjudicar el crecimiento de la hierba.

Una vez posicionada la maceta, abrirás un pequeño agujero en el centro de la arena que esta posee, del tamaño suficiente para retener posteriormente la raíz y parte del tallo del cebollín, los cuales luego vas a sostener con la misma arena, así ya tendrás tu cebollín listo para el cultivo.

Ahora todo el proceso dependerá de ti, pero nada demasiado complicado, pues seguro sólo necesitarás de un minuto diario para añadir apenas unas cuantas gotas de agua al tallo y al menos en un mes verás los resultados, dejando crecer tu hierva el tiempo que creas necesario, esperando que no sólo con seguridad crezca al menos un cebollín, sino más de uno, lo cual te ahorraría como mínimo una compra más en el supermercado y minutos menos de recorrido en el mismo.