¿Cómo ser un buen moderador?

En una reunión de trabajo se presentan diferentes puntos de vistas que solo puede ser ordenados por el organizador de dicho evento. A ésta persona se le denomina moderador. Y debe ser capaz de tranquilizar los ánimos y al mismo tiempo lograr la participación de todos los integrantes.

No todo el mundo está capacitado para ser moderador. Es por ello que es necesario, conocer algunos de los aspectos importantes de esta función.

El debate no es un evento anárquico

El arbitraje es muy importante dentro de un debate. En las reuniones de trabajo los participantes suelen olvidarse de que se trata de una conversación en el que todos pueden aportar ideas para llegar a una solución. El moderador debe dejar claro que no se trata de un acto de desahogo de emociones. Esto suele ocurrir motivado a que se desarrolla en un clima informal, en el que hay libertad de expresión. Esto puede llevarlos a saltarse ciertos límites que como es lógico el moderador será el encargado de encausar.

Conocer el tema

Su función no solamente de debe limitar a dar derecho de palabra a los miembros participantes del debate ya que estos buscan respuestas a sus planteamientos y soluciones a los problemas. Para ello es necesario que el moderador conozca a fondo lo que se va a tratar y tener a la mano posibles respuestas a las solicitudes.

La conciliación

Las miradas del público siempre van a estar posadas hacia el moderador, ya que este debe poseer un carácter conciliador, analista, pacificador e intermediario. Para la solución de problemas y poder llegar a acuerdos concretos con las partes involucradas.

Carácter

A menudo los participantes poseen temperamentos diferentes, querrán intervenir mientras otros hablan y exponer su aprobación o desaprobación con el tema. Por lo que el arbitraje debe estar por encima de ellos y exigir silencio o establecer normas más en el momento apropiado. Para poder darle fluidez al debate y que no se convierta en un desorden.

Como es lógico, estas actitudes solo se tomarán en casos extremos.  Pero no hay que dudar en hacerlo si se cree conveniente, y hay que recordar que no se le debe dar privilegios a unos por encima de otros. Ya que esta forma de actuar genera más conflicto y competitividad.

Iniciar con una pregunta

Por último, antes de iniciar el debate, haz una pregunta y déjala al aire. Mientras das una breve introducción y posteriormente ceder el derecho de palabra.