Cómo hacer una pelota

Los chicos siempre necesitan algo con que divertirse y muchas veces no tienen a la mano una pelota para armar un buen juego de béisbol o corretear tras un balón para jugar al futbol. Pero si estamos dispuestos a que se diviertan y no hemos logrado comprar una pelota, esta es una forma clásica de hacer una pelota que sirva al menos para jugar una tarde, aunque luego termine deshecha.

Necesitamos

Un rollo de hilo grueso, que no sea de costura. Papel periódico, pega escolar, cinta autoadhesiva engomada (auto fundente) de la que se usa para trabajar en electricidad, mucha paciencia y dedicación.

Comenzamos por hacer una bola de periódico, arrugándolo lo más posible y comprimiéndolo con ambas manos. Para ayudarnos un poco, lo rociaremos con agua y a cada capa mojada le colocamos encima una hoja seca. Repetimos el procedimiento hasta que la última hoja seca quede adherida a la última mojada, pero no se desintegre. Esta bola de periódico la sumergimos en pega escolar y esperamos a que seque por completo.

Empezamos entonces a enrollar el hilo envolviendo la pelota de papel, hasta que haya sido completamente cubierta y, al terminar, envolvemos en cinta adhesiva auto fundente hasta que ya no se vea el hilo.

Ahora procedemos a envolver nuevamente con el hilo y, una vez enrollada por completo, vamos a sumergirla en la pega escolar que previamente habremos colocado en un recipiente desechable. Si no se puede sumergir, es necesario que al menos se pueda cubrir toda la pelota con la pega. Tomamos la pelota con una pinza y buscamos un lugar donde ponerla a secar.

Reforzando la pelota

Ahora necesitamos darle nuevamente consistencia. Volvemos a enrollar con el hilo y, una vez cubierta, procedemos a cubrirla con la cinta autoadhesiva. Al terminarla, la colocaremos en el horno de la cocina, donde solo estará encendida la luz piloto. Esto amoldará la pega en su interior y la hará más compacta.