Cómo hacer un yoyo

Este es un juguete muy popular, su fabricación se ha hecho en masa a lo largo del tiempo, pero aquí tenemos unas cuantas formas de hacer un yoyo, utilizando materiales reciclados, algo que nos supondrá un considerable ahorro ya que no gastaremos comprando un juguete de marca, pero le daremos a los niños algo para entretenerse.

Como bien sabemos, un yoyo no es más que, un par de ruedas con una cuerda en medio que se enrolla y estira, conforme se lanza hacia abajo o hacia adelante, el jugador busca de hacer maromas con el procurando no enredar el cordón y tampoco romper las ruedas al golpearlo contra el suelo. Entonces vamos a aprender  cómo hacer un yoyo.

Materiales

Podemos hacerlo con tapas de botellas grandes, esas de los contenedores grandes de 18 litros son excelentes para esto. Tomamos 4 de esas tapas y una pajilla de chupeta (paletas de caramelo), cortamos la pajilla de modo que su tamaño no supere el de dos tapas juntas, atravesaremos dos de las tapas con ese trozo de plástico, de manera que sobresalga de una a la otra, esto unirá las dos primeras tapas por el lado cerrado, quedando la parte hueca hacia afuera, colocamos un poco de silicón por el lado hueco de las tapas para fijarlas, luego pegamos las otras dos tapas por la parte hueca, de modo que se cierren entre ellas y el trozo de pajilla no las llegue a romper, quedando dentro de ellas, para fijar las tapas que ahora van a formar entre las 4 solo dos ruedas cerradas con un espacio vacío, utilizamos silicón frio, colocamos una pinza de ropa en cada rueda para evitar que se muevan y las dejamos secar bien y luego si es de nuestro gusto, lo podemos decorar pintándolo con barniz de uñas o pintura de cerámica.

Último paso

Al terminar de unir las tapas, colocaremos el cordón del yoyo, que no debe medir más de 1, 30 mt, hacemos un pequeño nudo en la base del hilo para que no se salga del yoyo y ya estará listo para jugar.