¿Cómo hacer aros de cebolla?

Seguro que has probado este plato en varios establecimientos de comida rápida, y de seguro quisieras saber cómo se preparan. Para poder hacer los aros de cebolla tu misma desde casa. No tendrás que esperar más para comerlos cuando tú quieras, puede ser hasta para la celebración o un momento especial sorprendiendo positivamente a tus comensales.

Al llevarles esta entrada que parecerá comprada en cualquier tienda de comida, pero aclarando que los hiciste tu misma, de seguro te pedirán la receta .Es ideal para  un día de comer hamburguesas muy buenas.

Puede ser una entrada o un snack, son de corta preparación lo que quiere decir, no tendrás que pasar horas en la cocina hasta obtener el resultado deseado como el de las fotos. El punto más importante es lo crujientes que deben quedar, pero se deseen al entran en la boca.

Sinceramente aunque pueden ser poco saludables son una alternativa para esos días donde quizás no quieras comer tan sano, pero  delicioso. Cuenta con unos ingredientes que tampoco tienen un precio elevado, puesto que ese es otros de los puntos importantes buscando que la preparación esté disponible para el alcance de todos.

Ingredientes para hacer aros de cebolla

• 2 cebollas medianas
• 1 taza de harina común
• 1 taza de leche
• 2 cucharadas de aceite
• 1 huevo
• Una pisca de sal
• Aceite para freír en cantidad abundante, es decir toda la que se necesite.
• Pimenta blanca molida al gusto

Preparación de los aros de cebolla

• En un recipiente bale de manera suave y leve el huevo
• Agrega el aceite y luego la leche sin dejar de batir
• Cuando estos estén bien integrados, procede a ir integrando de a poco, no dejes de batir para evitar que se formen grumos.
• Sal pimienta para que quede una crema suave y reserva
• Corta la cebolla en aros finos, busca que queden de aproximadamente un centímetro de grosor. Tienes que cortarla estando completa, y luego procede a separar las capas, de esta forma quedaran los aros de la manera ideal.
• Pasa los aros por la mescla de harina. De leche y huevo que habías reservado
• Fríe en una abundante aceite caliente, en una sartén profunda, no frías demasiados a la vez, pues una vez listos te será más sencillo el proceso de retirarlos de la olla

• Deja que se escurran sobre un papel absorbente, así no consumirás tanto aceite