¿Cómo afrontar un despido?

Afrontar un despido no es nada sencillo, en especial si se trataba del primer trabajo o si era un trabajo de años. Las razones por las que un despido puede ser algo complicado y difícil son tanto emocionales como prácticas. Por un lado, las personas pueden sentirse traicionadas por los empleadores, sentir un golpe en su autoestima por pensar que no hicieron bien las cosas.

Esto por no saber qué hacer en adelante, por sentir que es un alto a nuestro progreso profesional y por las presiones que se suman si hay una familia que mantener y gastos que atender. Por el otro, perder un trabajo nos corta una fuente segura de ingresos, tambalea nuestra sensación de estabilidad y dificulta el mantener a nuestra familia.

Afrontar un despido es un proceso complejo que exige entereza mental y enfoque para seguir adelante y hallar un nuevo empleo. Aquí te daremos algunos consejos para que puedas superar los obstáculos que afrontar un despido. Lo supone y logres encaminarte hacia un nuevo empleo.

¿Qué debemos hacer?

Lo primero que debemos hacer para afrontar un despido será mantener la compostura y el enfoque. No podemos permitirnos que esta situación nos derrumbe; ello no significa que no debemos hacer nuestro duelo, por supuesto que sí. Un despido es una pérdida y debemos manejarlo como tal, mas no debemos atascarnos en lamentos y seguir adelante. Entendiendo que es algo de lo que podemos salir bien parados.

Afrontar un despido no es el fin del mundo, aunque lo parezca. Podemos darle una nueva perspectiva, quizás verlo como una oportunidad para redireccionar nuestra carrera o enfocarnos hacia otros objetivos que aplazamos. Idea un plan de acción, replantea tu futuro y planes; pregúntate si quieres redefinir la dirección de tu carrera o seguir en la misma línea que seguías antes del despido. Luego, dedícate a buscar nuevas oportunidades laborales.

Lo idóneo para afrontar un despido será que actualices tu currículum y lo publiques en portales de empleo (LinkedIn es una excelente opción para ello) o lo repartas tú mismo a otras empresas. Aprovecha el tiempo para hacer cursos y mejorar tu perfil, maximiza oportunidades.

No pierdas contactos

Mantén vivos los lazos, no pierdas contacto con tus ex compañeros de trabajo. Ellos podrían conocer personas que te pueden ofrecer empleo o incluso ser tus futuros empleadores. Si trabajan en una nueva empresa, la ventaja a tu favor es que ya conocen tu trabajo.