Cómo preparar un rico garbanzo
Una de las legumbres más importantes dentro de la cocina es el garbanzo. Entre sus cualidades importantes a nivel culinario y nutritivo está una rica fuente de fibra y calorías. Los garbanzos tienen un increíble sabor que puede acompañar la preparación en las comidas. Además, tiene unas valiosas condiciones en su conservación en el hogar, ya que pueden ser congelados por meses sin dañarse.
Guiso de garbanzos
La forma correcta de preparar un garbanzo es en un recipiente con agua fría y una cantidad pequeña de sal. Luego de medio o un día entero, el garbanzo adquirirá una contextura delicada y apetecible. El tamaño del grano se vuelve ideal mientras se vigila el crecimiento del garbanzo.
Un rico guiso de garbanzo combina tocino, choricillo, un par de dientes de ajo, perejil, pimentón, laurel, sal y pimienta. Para prepararlo de forma deliciosa se dejan los garbanzos en remojo durante la noche anterior, se elimina el agua y se cocinan. Durante la cocción se agregan las dos hojas de laurel, el pimentón picado en pequeños cuadros, el ajo molido, sal y pimienta al gusto.
Cuando está listo, molemos la taza de garbanzos y los mezclamos con una taza y media del líquido en que se cocinaron. Vuelve esa misma mezcla a la olla para añadirle el choricillo junto al tocino picado finamente. Se deja hervir otros 20 minutos y se sirve con un toque de perejil.
Además, a esta preparación se le puede añadir una zanahoria para darle color y unas espinacas o acelgas para otorgarle más sabor. Recuerde que los garbanzos se pueden sofreír al gusto, aderezar con distintas especias y otorgarle un rico sabor para compartir en el almuerzo. Es un alimento ideal para prepararlo con arroz o simplemente tomarlo como un asopado. Los garbanzos se vuelven un rico alimento lleno de nutrientes que complementan cualquier alimento del día.