Cómo limpiar plata con facilidad

La plata es un metal hermoso y de un precio relativamente alto que cuenta con un brillo especial. Los objetos confeccionados con plata  tienen una elegancia particular. Este malestar suele usarse para confeccionar joyas, cubiertos y platos. Además de su belleza, se trata de un material muy frágil, propenso a desarrollar manchas, opacidad y marcas de golpes y rasguños con mucha facilidad.  Para mantener en buen estado este tipo de piezas proporcionamos algunos métodos limpiar la plata y cuidado especial para mantener estas piezas significativas.

Cuidado diario

Para el mantenimiento diario de esas piezas es necesario limpiar la plata prontamente después de su uso. Aunque no se usen con regularidad, se recomienda lavar con agua caliente y detergente suave con regularidad. Esto se hace para evitar manchas por acumulación de polvo u otros corrosivos.

Asimismo se recomienda limpiar la plata separada de los demás objetos puesto que el roce puede dañarlas. Del mismo modo, se recomienda evitar usar guantes de goma puesto que este material corroe la plata.  Para secarlos lo mejor es  usar un paño suave de algodón para evitar rayones y maltratos.

Cuidado ocasional y pulido para limpiar la plata

Si no cuentas con el tiempo para realizar un cuidado diario o semanal se recomienda pulir la plata. Cuando se crea que comienzan a aparecer manchas o tonos más oscuros es el momento indicado para limpiar la plata.

Puedes usar un paño de algodón suave o un hisopo para alcanzar las zonas más difíciles. Es ideal frotar solo en línea recta y enjuagar el exceso de líquido para pulir con agua tibia y secar con un paño seco y limpio.

Un método alternativo en caso de no contar con crema pulidora es pasta dental.  Debes usar un dentífrico en pasta y que sea blanca. Toma un paño húmedo y suave y agrega un poco de pasta dental. Frotar esta mezcla suavemente con movimientos verticales sobre la superficie de plata para devolverle su antiguo brillo.