Cómo escribir una canción

No solo las canciones de amor se hacen necesarias. Una buena canción puede significar impacto social por su letra, generar uniones entre personas y expresar sentimientos ocultos de quien la escribe. El problema, en muchas ocasiones, es que no nos atrevemos a escribir algunas prosas por nuestro desconocimiento por el mundo musical.

Encuentra tu inspiración

Como casi todo lo que nace de nuestro ser, encontrar un tema sobre el cual escribir es lo primero. Pero en este sentido, saber cómo te sientes o cómo está tu estado de ánimo es importante, ya que en eso se convertirá tu canción al momento de darle forma. En la música en general, los sentimientos juegan un rol bastante importante. Trata de recordar algunas frases, conversaciones o momentos que te hayan hecho sentir algo preciso. Puedes además recordar algunas de tus películas favoritas que te hicieron llorar o reír. Analiza todos estos sentimientos.

Escoge el ritmo

No necesita un oído musical preciso para la composición. Solo es elegir qué ritmo te gustaría que tuviera tu canción o si quieres empezar con la letra primero y luego pedir ayuda con el ritmo. Muchas veces tarareamos una melodía que nos gustaría adaptar (ahí comenzamos con la música) o tenemos una frase de impacto que nos gustaría musicalizar.

Lo siguiente es la melodía. En este punto hay dos opciones: si conoces de composición, aplica tus conocimientos en ello y, si desconoces el tema, pide ayuda. Tal vez algún compañero músico o alguien íntimo a quien quieras explicar tu ritmo. Si eres muy receloso de la letra, explica el sonido que quieres.

Escribe tu letra al ritmo de la melodía. Trata de adaptar las tres aristas y tendrás tu pieza musical. Muchas veces necesitarás reescribir tu canción o cambiar la melodía. Pero tranquilo, con persistencia, calma y constancia podrás hacerlo.