Cómo preparar un brunch

El brunch es una de esas tradiciones anglosajonas que han logrado convertirse en un acto popular alrededor del mundo. Esta comida se caracteriza por ser una mezcla entre almuerzo, desayuno y darse a media mañana, como a las 10 u 11 de la mañana. Preparar un brunch es una de las mejores formas de pasar un tiempo agradable con amigos cercanos o familiares, o como un medio de reunión con equipos de trabajo.

Preparar un brunch es muy sencillo y solo se debe tener en cuenta algunos pequeños detalles.

Las bebidas

Para preparar un brunch de calidad, no puede faltar el café y el zumo de frutas. Se puede hacer un café solo o con leche, todo dependerá de los gustos de los invitados, además se debería tener zumo de frutas fresca. El más popular para el desayuno es la naranjada o limonada.

Para preparar un brunch profesional, las bebidas alcohólicas deben estar vetadas. No se puede servir alcohol de ningún tipo en este evento, ya que se hacen a una hora temprana del día.

La comida

Se debe hacer una mezcla de desayuno y almuerzo para preparar un brunch. Lo ideal sería tener un poco de fruta, cereal y frutos secos. La persona verá que todo está servido en la mesa y ella misma formará su platillo personalizado.

Se debe contar con huevos, ya sean revueltos o tipo benedictino. Todo dependerá de la creatividad de la persona que va a preparar un brunch.  No pueden faltar el queso, el jamón y algunos embutidos que ayuden a darle un aspecto refinado al brunch.

Para hacer que el brunch sea lo más completo posible, es necesario poner algunos postres, como galletas, magdalenas o tartaletas de fruta.  Los postres no están sujetos a regla, la persona puede explotar su creatividad al máximo.