Cómo cuidar un tatuaje

En los últimos tiempos la popularidad de los tatuajes ha ido en ascenso y actualmente se le considera una de las expresiones artísticas más comunes. Sin importar la clase o grupo social, y al tener la edad permitida, las personas acuden a esto como una manera de expresión del ser mediante su piel y usan su cuerpo como lienzo para plasmar este arte urbano.

Los tatuajes son de alto costo y al ser elaborados mediante múltiples heridas en la piel requieren de un delicado cuidado. El proceso de cuidado de un tatuaje está muy relacionado con el resultado final del mismo, por eso, para lograr el resultado deseado es necesario seguir unos pasos fundamentales.

Cuidado en las primeras horas

Al finalizar el tatuaje el artista realiza un vendaje con papel plástico, aplicando anteriormente una crema desinfectante en el área. En el momento de retirar el vendaje, asegúrate de tener las manos limpias y secas. Si el papel se adhiere al tatuaje, aplica un poco de agua a la venda, una vez que la has retirado no necesitas colocarla otra vez y si el dolor es muy severo toma ibuprofeno o algún calmante.

Lavar el tatuaje

Otro factor importante en el cuidado de un tatuaje es lavarlo. Para hacerlo es necesario usar un jabón suave, sin olor, haciendo espuma en las manos y luego aplicándola sobre el tatuaje suavemente.

Después de dos o tres días

Luego de unos días el tatuaje comienza a secarse. Esto produce escozor y la aparición de restos de piel muerta. Para que la pigmentación se cumpla adecuadamente no se puede rascar el área ni usar ropa ajustada, se debe aplicar una loción hidratante a base de aceite cada 3 o 4 horas, o cuando considere necesario. Es importante recordar que el tatuaje en su proceso de curación no se debe exponer al sol ni al agua salada de la playa.