¿Cómo sacarle el mayor provecho al durazno en la cocina?

Durazno, ese dulce néctar que parece increíble. No hay nada que vaya mal con esta maravillosa, suave y jugosa fruta. Su color, sabor y textura son únicos en la tierra. Queda perfectamente con platos dulces y salados, todo depende de la creatividad que puedas incorporar en la cocina. En algunos países esta fruta solo se consume en ciertas festividades, en otros la pueden comer todo el año.

El durazno es originario de China, donde se toma como un símbolo de larga vida e inmortalidad, esto según la filosofía taoísta.  El durazno proviene de un árbol que florece solamente, en época de primavera, da frutos en el verano y en el otoño, se le caen las hojas. Es una delicia para todo el año.

Con respecto a sus propiedades, el durazno cuenta con vitaminas A, E, K B1, B2,  y especialmente de la vitamina  C. Contiene minerales como fósforo, potasio, luteína, sodio, magnesio,  calcio, niacina, bioflavonoides,  tiamina o selenio. Pero, para aprovechar sus nutrientes, es recomendable consumirlos frescos y con piel.

Dulce cocina

Te mostraremos distintas preparaciones que puedes acompañar con esta deliciosa fruta. Para la primera receta, necesitarás masa de pastel, estas ya vienen congeladas del supermercado. En un molde para cupcakes volteado, coloca la masa y corta hasta hacer cuadros sobre cada espacio del molde, así crearás una especia de copas. Hornéalo durante unos 15 minutos para que endurezcan. Luego, agrega trozos pequeños de durazno y crema batida con un toque de miel. Será un postre inolvidable.

Para nuestra segunda opción, necesitarás duraznos grandes y frescos, además de masa de hojaldre. Corta cuadrados de esta masa y colócalos en una bandeja con papel encerado o mantequilla y harina para que no se pegue. Corta los duraznos en dos mitades, luego de cada una, saca trozos finos para crear un abanico. Coloca un poco de mermelada de durazno en cuadrados hechos con el hojaldre, luego coloca la fruta encima y dobla los extremos.  Hornea unos 15 minutos y sirve con azúcar impalpable sobre la mini tarta.

La opción salada

El durazno queda muy bien en ensaladas. Mezcla lechuga morada, lechuga verde, queso de búfala y trozos pequeños de durazno. La receta sirve para cenar o acompañar un plato fuerte. Lo puedes aderezar con vinagre balsámico, aceite de olivo y un toque de miel. Saca tu mejor botella de vino tinto y prepárate para descubrir todas las bondades de esta imponente y dulce fruta. ¿Te atreverías a preparar alguna de estas recetas?